lunes, agosto 01, 2011

Pasión por lo que haces...

También la pasión es un ingrediente indispensable: “Si no tienes pasión nunca vas a conseguir la disciplina. Y sin disciplina puedes tener mucha pasión, pero nunca puedes llegar a nada. Ambos términos están unidos, son un mismo concepto en el arte”.
Gustavo Dudamel.

Cuán felices son los que hacen aquello que aman...
Cuán desgraciados somos los que no...
Y peor aquellos que siquiera sabemos que nos apasiona,
porque éstos en verdad vivimos como si estuviéramos muertos...
____________

En mi continua lucha por ver las películas que aún no he visto encontré una que me llamó la atención. Revolutionary Road es protagonizada por Kate Winslett y Leo Di Caprio, ambos muy buenos actores. Grosso Modo, trataba sobre una joven que luchaba por ser actriz y un joven que era un loco de carretera. Una noche se encontraron en un bar, hubo química y se amaron. Se casaron y se fueron a vivir a una bucólica zona, llamada como el nombre de la película. Cada quien asumía sus roles de manera animosa, lo necesario. Tuvieron varios hijos y la vida con el pasar del tiempo se volvió monótona. Él iba a trabajar y ella estaba en la casa haciendo oficios.

Una noche él se quejaba de que estaba obstinado de la vida que llevaba y que no tenía como salir de ella. Por su parte, la chica hace ya varios años que se comenzaba a sentir asfixiada con la vida que tenía, y le propone mudarse a París, la cual era una ciudad que el chico añoraba desde joven. Para una actriz en la década de los cincuenta o sesenta era una oportunidad dorada para hacer una carrera, de modo que para ambos era una excelente opción. Lamentablemente en este caso, la chica quedó embarazada, y al chico, debido a una fanfarronería suya con un cliente porque se iba ya del trabajo aquél que tanto detestaba le salió todo al revés, pues ese estilo irreverente o audaz era el que buscaban unos ejecutivos de la empresa para lanzar un nuevo modelo de productos... Ante estas dos situaciones el joven cancela el viaje a París. A pesar de no gustarle lo que hacía, el chico conocía personas, ganaba dinero y ello compensaba en algo las otras necesidades, pero la chica volvía a su monotonía asfixiante. Una tarde, la chica decide interrumpir su embarazo en su casa, las cosas salen mal y la chica muere en el hospital. Una de las escenas finales, es el chico llevando a sus hijos al parque, sumido en una profunda tristeza, con una pareja de amigos, a la distancia, lamentándose de tan nefasto descenlace. Entre éstos amigos, el esposo, quien añoró siempre y tuvo por un instante a la chica protagonista, sufría también en silencio.

No es fácil descubrir la propia vocación. A ello debes sumarle la presión recibida de todo lo que tienes alrededor: familia, amigos, las necesidades económicas, pareja, en fin... Todo esto conspira contra el propio deseo de ser lo que se quiere ser. Pero en verdad, es peor cuando ante tanta presión no sabes qué hacer igual...

Cuando estaba por graduarme de la secundaria, mi familia me decía que estudiara algo que me produjera sustento. En el liceo hice una prueba vocacional y salí hábil para muchíiiiisimas cosas, de modo que no fue mucho en lo que me ayudó la misma. Más allá de la modestia, siempre me he caracterizado por ser hábil en muchas cosas, y mucha gente ha sido reconocedora de esto; eso por un lado es muy bueno, pues eres versátil, pero por otro no, porque eres bueno en muchas cosas y, o las mismas las aprecias como superadas, como algo que no añade interés a tu vida, o te pierdes entre tantas cosas que no te especializas en una concreta. Entonces, te vuelves un genio para muchas habilidades pero un incompetente para alguna en particular. Esto último dicho, es una afirmación casi hecha a la fuerza. Tengo la creencia que cualquiera tiene capacidades para lo que se proponga hacer en esta vida, pero hay otros que me dicen que esto no es así, que no todos tenemos capacidad para todo. En fin.... Esta es una parte del problema...

Lo otro, tiene que ver con el hecho de saber y lograr hacer aquello que nos apasiona. ¿cómo se sabe si algo nos apasiona? he estado buscando la respuesta arduamente, y la misma no puede ser más sencilla... Un día, mi jefa me hacía unas observaciones sobre un trabajo que estaba haciendo. En medio de las mismas, le pregunté si no estaba cansada de hacer lo mismo por tanto tiempo... me dijo que ella no hacía lo mismo todo el tiempo, que cada caso que llegaba era algo nuevo, por ende, no puede ser "lo mismo" el trabajo que se hace.... Yo la miré atónito...

Ese día me quedé pensando en esa respuesta, y encontré un corolario, o más o menos, algo que se le pareciera. Me imaginé por instantes el trabajo de un diseñador gráfico: el mismo usa las herramientas necesarias para hacer un diseño cualquiera, hoy puede ser un árbol, mañana un edificio y otro día una caricatura... ¿acaso éste hace lo mismo todos los días?... En ese momento comprendí un poco lo que me decía mi jefa...

Ahora viene otra pregunta, entonces... ¿cómo puedes estar conforme de hacer procesos similares todos los días, de repetir las mismas tareas una y otra vez sin descanso, sin cansarte?, ¿cómo puede ser esto posible?.... Para mí esto es el infierno..

Pensando en estos dos ejemplos comprendí lo que era pasión.

En este momento no sé qué me apasiona en realidad... hay días que quiero ser un eficiente administrador (lo que estudio), otros días un músico prominente, otros un diseñador gráfico, otro productor de eventos audiovisuales, otro chef, y así, se me pasan los 365 días del año dando un paso a todas partes y quedándome en el mismo sitio, y esto me está consumiendo la existencia...

Jaja, aparte, la percepción que tienen de mí es variopinta: algunos dicen que puedo ser tremendo abogado o comunicador social, jajaja... En dos oportunidades me han confundido con un Médico (ni hablar de la especialidad) jejejeje... En otras ocasiones me han dicho que sería excelente como psicólogo.... jajajajaja.... Todo esto me da risa, no por que no pudiera ser cierto, sino porque, por ejemplo, en el caso de ser médico, ni idea, veo tres gotas de sangre y me desmayo... Abogado, quizás... Comunicador Social, es posible, pero con mi extrema timidez y hasta introversión.... Psicólogo, puede ser, aunque yo siendo más loco que mis pacientes lo dudo... jejeje... En fin... El caso es que aún no he encontrado eso que me apasione y me haga levantarme todos los días con una sonrisa enorrrrme grabada en la cara. Esto me está entristeciendo poco a poco...
En verdad quisiera encontrar mi pasión. De seguro mis días serían más felices, y no meros recuentos de los días anteriores.... Será que buscaré el libro de Comer, Rezar, Amar a ver si me localizo, xq el GPS ya no me hace los milagros... :D